Trasformados por el Poder de Dios Capitulo 20

Libres, limpios, coronados

Jesús no solo nos ha salvado, también ha traído sobre nuestras vidas,
un cumulo de bendiciones y de dones que si los pudiéramos pesar,
nos hundiríamos en el mar de su gloria.
Jesús nos ha hecho libres de las ataduras del pasado, nos ha hecho libres
del pecado y de la muerte. Y todo lo que arrastrábamos como carga en
nuestra vida, acumulado durante tantos años, nuestro Dios lo hizo
desaparecer por medio de su sangre preciosa. Los recuerdos que nos
acusaban por los errores que un día cometimos, Jesucristo los hizo
desaparecer, el dice en el libro de Isaias: " Yo, yo soy el que borro tus
rebeliones por amor de mi mismo,y no me acordare mas de tus pecados"
Que poder tan maravilloso,cuanta misericordia la que tiene Dios con
nosotros.
Necesitamos el conocimiento de las promesas y de la heredad que Dios
nos ha dejado en Cristo Jesús, su palabra dice que por falta de
conocimiento el pueblo perece. Y nosotros como cristianos,
como discípulos de Jesús, no podemos permitirnos el lujo de caminar en
estos tiempos sin la revelación de su palabra en nuestras vidas.
Jesús nos dice: Conoceréis la verdad y la verdad os hará libres. Sin la
verdad de Dios el enemigo vendrá muchas veces a presentarnos las cosas
del pasado, haciéndonos creer que aun están vivas, pero el lanzó a los mas
profundo del mar nuestras maldades, nos hizo nuevos.
Aprendamos, acumulemos tesoros de conocimiento, para rebatir las
mentiras del diablo.
El nos ha limpiado de todas nuestras maldades, y nos ha vestido con ropas
hermosas, ha quitado de nosotros la culpa, y nos ha sentado a la mesa real,
para participar de sus manjares, carne de príncipes y vino real.
Cristo nos ha coronado de justicia,de autoridad,de victoria, tenemos poder
hacia toda fuerza del maligno y nada nos dañara. El nos dice
que ningún arma forjada contra nosotros prosperara, dice que caerán mil y
diez mil a nuestro lado mas no nos llegara a nosotros; el nos guarda de las
trampas del diablo.
Toda la palabra de Dios es para nosotros, es para este tiempo, y hay que
tomarla en el espíritu no desechando nada de los que Dios nos dice.
Siéntete libre, limpio y coronado con el poder de Dios en tu vida, y
levanta tu cabeza, pues hay victoria en Cristo Jesus.